El masaje con piedras calientes es una terapia que utiliza piedras lisas y calientes, comúnmente de basalto volcánico,
para relajar profundamente los músculos y aliviar la tensión acumulada.
Las piedras, que pueden colocarse en puntos específicos del cuerpo o ser usadas por el masajista durante el masaje,
permiten aplicar una presión más profunda sin causar molestias,
al tiempo que el calor mejora la circulación sanguínea y el bienestar general.
¿Cómo funciona?
Uso de piedras de basalto:
Se utilizan piedras volcánicas (basalto) por su capacidad de retener el calor y su superficie lisa.
Calor y presión:
El calor de las piedras penetra en los músculos, facilitando la relajación y permitiendo
al terapeuta trabajar con mayor profundidad en los tejidos.
Maniobras de masaje:
El terapeuta combina la aplicación de calor con técnicas de masaje para aliviar contracturas,
mejorar el flujo sanguíneo y liberar la tensión.
Beneficios clave
Alivio muscular:
Reduce la tensión, las contracturas y los espasmos musculares.
Mejora de la circulación:
El calor estimula la circulación sanguínea, llevando más oxígeno y nutrientes a los tejidos.
Relajación profunda:
Ofrece una experiencia relajante que calma la mente y el cuerpo, aliviando el estrés y promoviendo la paz interior.
Mejora de la flexibilidad:
Al relajar los músculos, se mejora la flexibilidad y el rango de movimiento.



